ENTERRAR NUESTROS MALOS RECUERDOS,
¿ES REALMENTE NUESTRO CAMINO A LA LIBERTAD?
Por: Alejandra Osorio quintero
INTRODUCCIÒN
Tokio ya no nos quiere es una interesante novela de ficción en la cual me he basado para escribir el presente ensayo; esta novela fue escrita por el joven director, guionista y escritor español Ray Loriga hijo del ilustrador José Antonio Loriga y de la actriz de doblaje Mari Luz Torrenova; esta una novela que en su momento e incluso ahora genera en las diferentes personas que la leen muchas opiniones encontradas.
Algunos críticos de la literatura consideran que esta es la mejor novela de este joven escritor que en la actualidad no sobrepasa los 45 años, otros sin embargo consideran que es una novela vacía, repetitiva sin trama, que termina justo en el momento que debería estar empezando; mi opinión sobre esta, oscila en la mitad de los dos extremos pero de esto se hablare mas adelante.
Debo ante todo decir sobre ella que es una novela relativamente nueva (1999) escrita como ya dije por un autor español muy joven que trata de imprimirle rasgos futuristas y de ficción, pues esta historia se enmarca en los primeros años del siglo XXI donde pueden existir cosa sorprendentes que incluso hoy (2010) no hemos llegado a conocer o a crear.
Una de las cosas que mas tomo mi atención cuando leí esta interesante historia, fue el rechazo y la pesadumbre con la que el protagonista de la obra concibe la vida, el amor y en especial la memoria (a la cual le voy a dedicar la mayor parte del ensayo), a esta ultima la desprecia, la aborrece, la considera el mas pesado lastre que puede cargar alguien y piensa que es mas liviana y fácil la vida sin ella, busca constantemente quemarla, eliminarla completamente de su cabeza y de su ser; “la química” como le dice el protagonista a todas las drogas que consume es una alternativa que tanto el como millones de personas en el mundo utilizan para este fin devastador.
¿Qué es lo que lleva a la personas a consumir drogas de todo tipo en cantidades tan alarmantes como las que se consumen hoy en día en el mundo?, talvez sea esa sensación de no querer vivir la vida como es, que invade a mucha gente, de querer borrar de vez en cuando la memoria como se borra un pizarrón, tal vez sea por que la gente no quiere llevar a cuestas todo el tiempo muchos de sus recuerdos, sus experiencias y parte de su vida, experiencias que las han llevado a odiar la memoria por que representa muchas veces su infelicidad y su dolor.
Pero, ¿Qué es en realidad la memoria?, podríamos definirla simplemente como esa facultad que tenemos los seres humanos que nos permite conservar y sentir de nuevo estados de conciencia pasados, considerándolos como pasados o como un simple fenómeno de la mente que permite codificar, almacenar y recuperar información, incluso podríamos considerarla solamente como la función principal del hipotálamo en el cerebro. Pero la memoria en realidad es mucho mas que esto, es lo que nos permite relacionarnos a diario con nuestros semejantes y nuestro entorno, es lo que nos da la posibilidad de establecer vínculos con los demás, lo que nos permite reconocer quienes somos y que queremos, la memoria es todo lo que representa nuestra experiencia, nuestros sueños y nuestra esencia como seres humanos.
El protagonista de la novela llega a decir en algún momento que “la memoria es como un perro estùpido al que le lanzas un palo y te trae cualquier cosa” esto es completamente cierto, así funciona ella a veces, y es precisamente por esto que muchos no la soportan, por que se empeña en desenterrar las cosas que de alguna manera quisiéramos olvidar para siempre.
En ocasiones quisiéramos desprendernos de esa pesada y dolorosa carga que pueden llegar a ser los recuerdos, recuerdos que la memoria saca a la luz cuando quiere, es cierto, y podemos odiarla muchas veces, pero yo me pregunto: ¿Qué seria de nosotros como personas sin ella?.
Tokio ya no nos quiere.
la historia y trama de esta novela gira básicamente en torno a la vida de un hombre español, joven y solitario que viaja por el mundo durante los primeros años del siglo XXI vendiendo el ultimo prodigio de la industria farmacológica, una droga capaz de borrar de la memoria y para siempre todos esos recuerdos que se quieren olvidar desesperadamente; este hombre llega a cometer uno de los peores errores de su vida y es el de consumir de su propia mercancía, esto lo hace constante y desaforadamente mezclándola con otra infinita cantidad de drogas, alcohol de todos los tipos y sexo de todas las maneras, pero con el tiempo su cuerpo, o mejor dicho su cerebro ya no aguantara tantos dardos y explosiones en contra suya y se doblara ante tanta presión, y es así como este solitario, deprimido y pesimista hombre terminara desfalleciendo y pasando por este motivo una buena temporada en una clínica de Alemania, mas solitario que nunca pues allí ni siquiera lo acompaña su memoria, lo único que le queda es el fragmento de un recuerdo muy lejano, el nombre y la imagen de una mujer, esto es lo único que queda en una memoria tan aporreada, desgastada y maltratada como la suya.
Es una novela llena de sueños inacabados y confusos, sexo, alcohol y drogas, en la que no se puede seguir una trama o hilo conductor muy definido, es una historia demasiado triste y pesimista de la vida para mi gusto, en realidad no cuenta nada bueno o feliz en ningún momento, todo es tristeza y desolación para este personaje que parece haber sufrido mucho en la vida, por que, ¿de que otra manera hubiera podido llegar hasta este punto?
En un principio la novela se sucede como una secuencia de fotografías casi repetidas en las que el protagonista sale, vende química, toma alcohol, tiene relaciones sexuales con todo el que se encuentre, en cualquier parte y vuelve a vender, drogarse, emborracharse y así vuelve a empezar un circulo vicioso que parece de nunca acabar, aveces por esto el libro se torna cansòn y monótono, y cuando realmente se pone interesante la historia y un tanto feliz, es cuando llega inevitablemente el punto final de esta triste novela, aunque debo rescatar que esta escrita de una manera muy rica descriptivamente, además que esta repleto de frases interesantes y meditativas que ponen a reflexionar un buen rato. En ultimas este libro no es ni tan bueno ni tan malo, hay a gente que le gusta mucho y a otros por el contrario les parece una perdida de tiempo leerlo, en fin para los gustos es que existe la variedad y ahí no hay nada que hacer.
Toda una ensalada de química.
MCP, MLP, LSD, LTC, GLP, cocaína, morfina, éxtasis, anfetaminas, opio, mariguana, luces blancas, noches lentas, llamas negras, niveladores de euforia, antidepresivos y en fin una inmensa e interminable cantidad de drogas de todo tipo, blandas, duras, liquidas, de colores, en pastillas, en ampollas, en capsulas, etc. Drogas que van a parar a personas de todo tipo y clase social, la gran pregunta seria ¿Por qué tanta gente en el mundo llegar a tener un contacto directo y en la mayoría de las veces permanente con todo este tipo de fármacos?
En estudios realizados por la organización de las naciones unidas (ONU) en el 2005 se calcula que el numero de personas que consumen drogas ilegales en el mundo asciende a los 200 millones de individuos, esto equivale al 5 por ciento de la población mundial, y lo mas alarmante de todo es que con cada día, mes, y año que pasa, el consumo aumenta de manera deliberada, y esto se da tanto en jóvenes de menos de 15 años como en adultos e incluso ancianos.
¿Qué es lo que los lleva a esto?, podrían haber varios factores que favorecen esta toxicomanía, deliberada, la desilusión podría ser una de ellas, desilusión del mundo, de la sociedad en la que viven, desilusión de los demás e incluso de ellos mismos; la depresión y la falta de rumbo en la vida, son otros de estos factores, así como los problemas familiares, económicos, el desempleo e incluso el mal ejemplo de sus padres o tutores.
Algunas personas que tienen serias dificultades para entablar relaciones con los demás, tratan de aumentar la confianza en si mismas con el consumo de estos estupefacientes, que les hacen sentirse, según ellos, personas mas ingeniosas
Agradables y fuertes. A otras les parece más sencillo recurrir a cualquiera de estas sustancias alucinógenas, que aceptar la responsabilidad de asumir el control de sus vidas.
Podría quedarme páginas y páginas hablando sobre muchos más factores que favorecen el consumo de drogas en la gente, pero en realidad todo esto podría resumirse en unas cuantas palabras: la gente se entrega al consumo de drogas por que como ya lo había visto en un principio, quieren olvidar, olvidar hasta es ultimo recuerdo alojado en su memoria que les causa tristeza dolor y hastío, y esa precisamente es la función de los ya tan mencionados fármacos, erosionar, quemar y borrar hasta el ultimo pensamiento no deseado. Lo que casi siempre sucede por desgracia, es que además de borrar los malos recuerdos, también borra los buenos, y las personas terminan quedando vacías por dentro, huecas, pues a diferencia de lo que sucede con la droga en la novela* donde se podía escoger minuciosamente el recuerdo que cada uno quería eliminar, en la vida real en cambio, va destruyendo por parejo todo lo que se encuentra en nuestra memoria.
Es por esto en torno a lo cual gira casi todo el consumo de drogas en el mundo entero.
Y retomando de nuevo un poco de la historia de el protagonista de la novela al que hago referencia, y tomando en cuenta la alta cantidad de drogas de todos los tipos que consumía este personaje y mirando mas a fondo sus motivos, que pensándolo bien no difieren mucho de los de las personas reales, puedo decir que en el se puede ver ese reflejo y esa condensación de los pesares y sentimientos que seguramente agobian a las personas que toman esta, como la única y mas drástica alternativa para “mejorar” sus vidas, en este personaje se puede ver ese repudio a la sociedad actual, el miedo a ser tragado por ella, esa tristeza y nostalgia con la que se ve el pasado y se presiente el futuro que en realidad, no van a tener.
Si en realidad lo que buscan las personas que consumen estas sustancias es olvidar, yo diría que es obvio que lo van a lograr, claro que terminan borrando su memoria por que eso es lo que hacen las drogas temporalmente, inducir a los que las consumen a estados de inconciencia y amnesia temporal, talvez por esto se vuelven adictos a ellas, porque quedan atrapados en un circulo vicioso del que no pueden escapar casi nunca; el gran problema viene cuando después de abusar en exceso de ellas terminan de verdad olvidándolo todo, tal y como le sucedió al personaje de la novela, no terminan recordando ni su nombre y acaban mas solos que nunca, el tiempo se les detiene pues no tienen la mas minima noción de su trascurso, la vida se les escapa de las manos sin ellos apenas darse cuenta de lo que sucede, y quedan en una especie de limbo.
No quisiera que suene como un sermón o una advertencia para las personas que la consumen, pues allá ellas con su vida, solo quiero decir que seria un final muy triste
Para personas que en su mayoría son jóvenes y podrían pensarlo mejor y cambiar de rumbo sus vidas antes de atreverse a tocar un veneno tan mortífero para el cuerpo, la memoria y el alma.
*Tokio ya no nos quiere, Ray Loriga, (1999).
Conclusiones
La mayoría de las personas que son adictas a consumir todo tipo de química, aseguran que al olvidar las presiones, angustias y problemas, se sienten mejores, se sienten libres, pero en realidad esto no es libertad, son personas que están encarceladas por la droga y ni siquiera se dan cuenta, piensan que no cargar con los recuerdos es la máxima libertad a la que se puede llegar, y lo cierto es que no es así, muchas de las cosas que guardamos en la memoria, por no decir todas, son las que nos hacen pensar como pensamos y ser como somos, son las que nos permiten diferenciar lo bueno de lo mal y DECIDIR, esa es en realidad la verdadera libertad, decidir sobre nuestra propia vida como amos y señores de ella.
Si no tuviéramos la memoria ocupada con recuerdos, vivencias y pensamientos, si la tuviéramos vacía, no seriamos mas que maquinas automáticas , yo diría que es justamente la memoria la que nos hace seres humanos mas sensibles, mas poderosos y sobre todo mas libres y por eso en mi opinión es mejor conservarla y protegerla, que destruirla deliberadamente, y aunque es cierto que muchas veces carga con los recuerdos tristes o dolorosos que hubiéramos querido dejar en el camino enterrados y olvidados, no podemos forzarla a que los destruya por que “su obligación es cargar con las cosas como son,” así es y así será para siempre.
Bibliografía
-Loriga, Ray. Tokio ya no nos quiere, plaza y Janez, S.A. editores 1999, Barcelona.
-Diccionario de las Américas, plaza y Janez, S.A. editores 1983, Barcelona.
-http://latormentaenunvaso.blogspot.com/2008/12/tokio-ya-no-nos-quiere-ray-loriga.html
-Wikipedia la enciclopedia libre, www.wikipedia.com
-el gesto y la palabra (la liberación de la memoria).